COSAS CALASPARRAS
¿Por qué el bar de La Esquinica está en la calle Lavador y no en la calle Lavadorcico?
¿Por qué no me escuchan? No puedo beber alcohol con esta medicación. Ya me gustaría.
¿Por qué nunca llego el primero a pagar? Mira cómo corro.
¿Por qué, cuando llego a pagar antes que nadie, el camarero dice que mi dinerico no vale?
¿Por qué sois todas tan guapísimas? Responden: ¿Por qué no te quedas? Tentación.
¿Por qué está todo tan rico, vayas al bar al que vayas?
¿Por qué nos hemos saltado la conferencia-exposición de las estructuras de Pérez Piñero? Porque parando en todos los bares acabas llegando tarde. Y lleno.
¿Por qué duermo fatal en la meseta, y aquí no hay quien me saque de la cama?
IDA Y VUELTA
Me lo tomo con calma porque estos locos quieren ir esta tarde y volver mañana. No tengo el corazón para estos sobresaltos.
PANDA DE MÚSICA
El privilegio de asistir a los ensayos de la banda municipal y bebercios posteriores. Me recibe una maravilla de zagala con una sonrisa cautivadora. Quieto, insensato. Repertorio variado. Grandes protestas porque el director pide la Jota de Murcia y le indican que eso no existe, que la Jota de Jaén. Populares de la tierra y, oh sorpresa, venir a Calasparra a escuchar música tradicional de Israel. Dicen que el mundo es un pañuelo pero nunca imaginé que lo sería hasta este punto. Mi viejo amigo Yossi se ha mudado a Murcia y nos encontramos aquí por casualidad. Siempre pensé que era del Mossad pero, lógicamente, nunca confirmó tal extremo. «Agente secreto» es porque es secreto. Esto es así en Haifa y en Jumilla. El primo Roque viene con varias garrafas de vino para el camino de vuelta. Agradezco infinito pero, como ya le he dicho unas treinta mil veces, no puedo beber. «Pa cuando te cures, acho» -respuesta por omisión. De las murcianas ni les cuento. Cosa más bonita de mujeres. «Si te quedas por aquí ya hablaremos» -dicen sin más. Por supuesto que hablaremos. Largo y tendido. Quédense con el mensaje: «Lo mejor del mundo, España. Lo mejor de España, Murcia. Lo mejor de Murcia, Calasparra. Y lo mejor de Calasparra, mi bella persona». Me lo contó doña Pascuala, titular del liderazgo del pueblo, organizadora de todos los eventos posibles, catalizadora de todas las energías y anfitriona desde los ochenta. Falleció hace años y dejó un vacío más grande que el cráter que deja la madre de todas las bombas. Recuerdo, igualmente emocionado, a su esposo don José María. Pensador, Alcalde, Diputado, Farmacéutico. Entró en política por la insistencia de los vecinos, condicionado a que se cuidase «lo social». Políticos muy diferentes de los actuales. Inicio la siguiente etapa de mi viaje, con profundo desacuerdo de mis murcianos del alma, «que me quede una temporada o para siempre». Ordenaré mis asuntos y, probablemente, aceptaré tan amable invitación. Vacía la barrica y recogido cada cuál en su casa, la oferta seguirá en pie a la mañana siguiente, porque las cosas que se ofrecen de corazón aguantan más allá del puntito festivo. Pueden apostar.
TAPEO
Una breve referencia a las tapas -las mejores que he probado jamás- y a los profesionales de la hostelería -lo mismo- que convierten la noche en algo memorable. Sobresaliente.
SPEED
Otra brevísima referencia con el ánimo de ayudar a las gentes de ciudad. El ritmo aquí es mucho más lento. Frente al comportamiento normal -tirando a subnormal- de los estresados, yo me inclino por perder la prisa y disfrutar del movimiento pausado. No corran. No sirve para nada. Si se calienta la cerveza te traen otra.
Excusatio Non Petita 